La ola de inseguridad contra los choferes de taxis está creciendo en distintos puntos de la provincia. En tanto que hace sólo dos días un taxista fue baleado cuando lo quisieron asaltar en avenida Independencia y Rufino Cossio. El violento robo ocurrió a las 20.30. “No podemos seguir trabajando así. Estamos totalmente desprotegidos”, expresó Ignacio Carreño quien se dedica hace varios años al rubro.
El pasado jueves a las 5.30 Maximiliano Fernández un chofer de 28 años, fue asaltado por dos sospechosos en Lamadrid y La Rioja, y le quitaron sus dos teléfonos celulares. El hombre denunció en la Policía que los pasajeros habían subido en calle Mendoza y Mitre. Un grupo de vecinos intentó linchar a los ladrones y la Policía pudo aprehenderlos.
Otro de los casos ocurrió el sábado a la madrugada. Dos jóvenes asaltaron a un chofer en Las Talitas y se dieron a la fuga en el taxi. La Policía persiguió a los sospechosos y los aprehendieron. Uno de ellos era menor por lo cual quedó en libertad por disposición de la Justicia. El otro involucrado, debía declarar en tribunales penales.
Testimonios
Ignacio Carreño, quien tiene parada en Maipú y Mendoza, contó que desconfía a la hora de subir a un pasajero y que la ola de inseguridad contra ellos está creciendo. “Te puede robar una persona bien vestida o así nomas, de que te roban te roban. Incluso pasa que chicas embarazadas te dicen que las lleves hasta un cierto lugar y cuando están pagando el viaje, te aparecen unos tipos y te asaltan”, expresó. “Esta gente actúa en banda y tenes que estar alerta todo el tiempo que dura el viaje. No sabes en qué momento te toca”, dijo Ignacio. El auto del joven es invadido por la incertidumbre y las miradas por el espejo retrovisor. Según dijo, los asaltantes lo confunden porque intentan establecer una charla mientras piensan el delito que cometerán minutos más tarde. “Una vez me pasó en la calle Chile y Thames. Había levantado a una señora en El Colmenar y cuando estaba abonando el viaje, vinieron unos chicos a robarme. Me sacaron el celular, el reloj y la plata que tenía. Me acuerdo que el chico se guardaba las cosas en el bolsillo de su buzo canguro”, se lamentó. El joven remarcó que los choferes de taxi trabajan muchas horas para conseguir algo de dinero y exige que haya más control policial en los distintos puntos de la provincia. Por su parte, Iván Mana contó que hace poco fue interceptado en Villa 9 de Julio cuando trasladaba a dos pasajeros. “Eran jóvenes y muy bien vestidos. Justo al frente de una iglesia me apuntaron con el arma y me dijeron ´no te hagas el héroe y danos todo´, además de que me robaron todo lo que tenía, se llevaron las llaves. Yo quedé varado hasta que apareció un colega y pudo auxiliarme”, expresó el chico. Carlos, quien pidió que su apellido no se publicara, dijo que uno de los cuidados que tiene a la hora de trabajar como chofer es elegir a qué persona levantar y a qué zona no ir. “Por ahí te cambian el destino y te confunde. Yo por lo menos no laburo de noche, elijo los horarios y prefiero trabajarlo al microcentro. Te asaltan tanto de noche como a la siesta”, remarcó. “Uno quiere cobrar al final del día. Un día llevé a un chico a la zona de La Costanera y cuando llegamos, sacó una punta y me amenazó. Le tuve que dar la recaudación… a veces dudas en darle porque igual te pueden lastimar”, expresó el hombre.
“La situación es cada vez peor”
Carlos Pizarro, secretario general del Sindicato de Peones de Taxis en Tucumán, los trabajadores sufren la inseguridad y que los hechos “abundan desde hace tiempo”. En esa línea, expresó que en estos últimos meses se incrementó la cantidad de ataques.
Uno de los últimos casos fue el de un hombre que fue asaltado cuando conducía su taxi en la intersección de avenida Independencia y Rufino Cossio. El chofer recibió un disparo en la espalda y tuvo que ser hospitalizado. “Hace tiempo que luchamos contra esto. El trabajador tiene que estar protegido, y no lo está”, expresó el sindicalista. “El asaltante ya no va sólo por la recaudación, sino que ahora te sacan el reloj, la batería y autopartes; después comercializan los elementos. Existe un mercado negro en esto”, dijo.
Encuesta: ¿qué opinás de Uber? Taxistas cordobeses en pie de guerraPizarro agregó que existen casas de venta de repuestos usados, donde muchas veces se han ofrecido elementos robados a choferes de taxi. “Hay gran cantidad de denuncias que no se hicieron además. El propietario no quiere blanquear (a un conductor) y alquilan los vehículos, cosa que no se puede. Entonces, el chofer sale a matar o morir. El trabajador sale a ganarse la plata como sea, levanta a cualquier persona en la calle arriesgando su vida con tal de ganarse un dinero. La situación es cada vez peor”, destacó.
Pizarro dijo que a pesar de que la Policía realiza controles en diferentes sectores de la provincia, ellos se sienten desprotegidos en la calle; sobre todo durante la noche. “Hay zonas rojas en donde no se hacen controles, o al menos no se los ve. Nosotros, no le echamos la culpa a la Policía, sabemos que también es complicado para ellos”, dijo. “En los horarios de relevo de los agentes, hay áreas que quedan liberadas. Necesitamos más control. Los mismos ladrones conocen los movimientos de la Policía y usan la radio de ellos robando la frecuencia. ¡Hasta eso!”, enfatizó.